El ilustrador japonés Takashi Nakamura dibuja los acontecimientos del día a día, desde cultivos cercanos de frutas y verduras y vasos de agua hasta escenarios más grandes de parques y bibliotecas. Takashi «creció leyendo manga», y esto ha influido en sus trabajos que a menudo se componen de líneas precisas y una aplicación de color muy suave.
Su enfoque en lo cotidiano es refrescante, ya que Takashi cambia las perspectivas de una imagen frecuentemente. «Siempre me gusta dibujar las pequeñas cosas de la vida, ya que es más probable que olvide esos momentos», explica. Son estos estudios más cercanos, los que realmente atraen al espectador, ya sea un lugar privilegiado entre la comida en un picnic o al lado de una mano que sostiene una chispa a punto de brillar.
Las ilustraciones de Takashi Nakamura se dibujan a mano y él disfruta de este acercamiento analógico. «Primero hago un borrador y luego borro partes de él para que haya un débil rastro de la imagen. Entonces empiezo a pintar con acuarela desde ese punto», explica. El uso de la acuarela da a sus trabajos regala un ambiente relajante y veraniego y ofrece un descanso de lo mundano.